martes, marzo 30

Día Dos, Súperhistoria #2


No siempre se tienen días completamente malos, o completamente buenos. A veces simplemente es un día más. Cómo lo fue hoy, o como quizás lo sea mañana, no necesariamente quiere decir que sea malo el día, o bueno en dado caso... Simplemente es tiempo, y pasan los minutos de las horas, de los días, de las semanas, de los meses, de los años... Y muchos años han pasado.

Me imagino ventanas, ventanas por las que veo personas pasar, y suelen estar abiertas por extrañas razones que hoy no diré, pero también alguna vez te escuche decir: "Si me duermo sin querer, deja la ventana abierta, de par en par", y pensé en la luz de luna llena, y no digo que eso me haga sonreír, sólo que las oportunidades se van, y no sé cuantas veces más me lo repetiré, supongo que lo suficiente hasta que pueda entenderlo del todo.

Uno siempre mantiene altas sus ¿Expectativas?, su sueños... es como más acorde, y quién puede culparme, soñar no cuesta nada y mucho menos hace daño, pero uno a veces renuncia a sueños, renuncia porque se cansa, y cansarse no es malo, soñar tampoco, a veces intentar mucho lo es, pero ¿Dónde está el límite? o ¿Cuándo sé que es suficiente?... Mírame una sola vez, espera, "entender, entenderte, entender... Entenderme", en un segundo día de tanto avanzar no necesariamente sé tiene que tener algo concreto que decir, pero aquí estamos y de esté lugar no me iré, sólo aquí esta la respuesta.

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