sábado, diciembre 31

El sueño que nunca soñé, Súperhistoria #31

31diciembre
Ella se sentaba siempre en el puesto del medio, en la tercera fila… En la sala de espera de la estación de autobús, una vez al mes, siempre en domingo a las 8:00pm. Él se sentaba a su lado, una vez al mes –coincidían-, siempre en domingo a las 8:00pm. La vida se gasta toda su energía en elaboradas coincidencias, no se conocían, tal vez una mirada furtiva, un roce de manos intencional, nada fuera del otro.
¿Cuánto tiempo debió pasar para que algo más se diera?… Lo suficiente para que él tomara la iniciativa de preguntarle por la hora, y ella responderle con su número de teléfono. La vida ayudó a juntarlos, pero ellos debían hacer el resto.

Una primera cita para considerar sin lugar a dudas que la segunda cita sería la confirmación “que el amor siempre puede más”, y así fue, a la tercera ya era completamente imposible ocultar que el amor al igual que la vida actúa de formas extrañas, y los detalles son la sonrisa del corazón cuando dos almas deciden amarse.

¿Qué necesitó ella para ser feliz?, justamente no fue tenerle a él, pero estar con él le hizo todo más sencillo, la felicidad siempre fue intrínseca a ellos dos por separado, simplemente un día como cualquiera, de esos en los que el cielo parece sonreír un poco y el sol no parece querer cocinarnos, decidieron compartir su felicidad.

Para él, tocar sus labios era comparable casi a la sensación de vértigo en el estomago cuando sientes caer en el vacío, comparable a ese chorro de adrenalina que corre libre por el cuerpo, comparable con la sensación de invulnerabilidad, de ingravidez, de transportación a lugar donde todo es posible y nada más existe excepto ellos dos, sólo los dos.

Pero, se hicieron las 9:00pm tiempo de abordar el autobús, de despertar del sueño, y vivir un poco la realidad, de darse cuenta que él nunca tuvo valor de preguntarle la hora y ella mucho menos de darle su número, porque la vida ayudó a juntarlos, ellos debían hacer el resto.

martes, diciembre 27

Sin Palabras, Xtraviada #5

ccbf3695b9aedcb3675bee76cc009de94e2b39e5_m

Cuando las palabras se agotan,
Cuando el destino se acaba,
Cuando miro hacia adelante
Y no puedo ver nada.

Cuando el silencio lo es todo,
Cuando mis manos no sienten,
Cuando el soplo de existir
Se ha ido para siempre
.

Cuando no existe un mañana,
Cuando el sol ya no está,
Cuando la soledad simplemente no se va
Y sin poderlo evitar se pierde la verdad
.

Cuando no sé sobre que escribir,
Cuando el amor ya no me llena,
Cuando la música ya ni se entiende
Y todos los sentimientos se vuelven piedra.

Cuando no sé si existir,
Cuando morir es igual que vivir,
Cuando vació me siento yo
Y sin palabras ya no quiero seguir.

sábado, diciembre 24

Lo que dura un suspiro, Súperhistoria #30

window
La melancolía se ha adueñado de ti, piensas en como dejar de pensar, vivir un poco más, tener el valor de levantarte de tu cama, abrir la ventana y mirar al cielo, para conseguir sin más un nuevo verso en tu historia.

Lo viste llegar, y así sin más… Te internaste en él, intentaste desnudar su intención, derrumbar su disfraz hasta que él no pudo más y dejó caer el telón. Todo quedó descubierto para ti. Te aferras muy rápido a las personas tanto como con las cosas, te aferras muy deprisa, eres explosiva, impredecible, efímera, la forma más pequeña del tiempo que tiene el universo.

Pero estás allí, acostada negándote por un instante abrir los ojos, sentir la brisa rozar cada poro de tu piel, como el universo se encarga de movilizar cada pequeña célula de tu cuerpo para surtir con aliento de vida  tu ser, pero te abstraes en él, te mueres por él tanto como vives por él.

Sólo de vez en vez te apartas de esa ventana, por donde todo los días lo vez pasar, prolongando la sensación del suspiro diario que te produce verlo, para vivir un poco pero no lo suficiente como para olvidar que mañana a la misma hora debes ir hasta la ventana a verle pasar nuevamente, y suspirar no para siempre pero si lo suficiente como para ser feliz un instante.

jueves, diciembre 22

Ella y él, Súperhistoria #29

diciembrem

Fue cuestión de tiempo para que la vida se tomara un momento de encontrarlos, de unirlos, de permitirles ingresar al juego y conocerse, y tal vez si todo salía bien, enamorarse. Fue cuestión de tiempo para que se tropezaran como dos extraños se tropiezan y nada pasa, pero con ellos todo pasó, se detuvo el destino, el universo, la energía… Se detuvo todo eso en lo que ellos a veces creen y en lo que no creen también.

 

Fue cuestión de tiempo para que él le pidiera una segunda cita, pero como ella no cree en las segundas partes prefirió tomarlo como una extensión de la primera… Y pensó para sí: “Contigo quiero vivir en una eterna primera cita, quiero siempre sentir el primer roce, ver tu primera sonrisa, dejarme abrazar por primera vez, por primera vez besarte… y así para siempre, de esos loops eternos de los que a veces suelo hablar y algunas otras veces no me sé entender”.

 

La vida a veces se toma oportunidades para inventarse historias con nuestras vidas, jugar a los dados, al azar… A juntar y separar, a reírse de nosotros y luego llorar a nuestro lado… Así pasó con ella y él.

 

Él se decía: “… El después lo desconozco, te quiero ahora, te quiero hoy que te tengo aquí y me tienes aquí y nos tenemos los dos, aquí y te escucho respirar y te siento vibrar cuando te abrazo y nuestros corazones se encuentran y es como si quisieran escapar, para no separarse nunca”… En su interior ella sentía “no querer nada menos que él, porque él era todo y más”.

 

¡Qué loco!, como el tiempo y la vida en sus amores del día a día se han encargado de inventarse una historia nueva con ella y él.

lunes, diciembre 5

Los meses se van, Paranoicas #26

e31f4959e278cb70cf3319f06c19e88b1a8a6256_m

Cuando no escribo, no existo… Y no existir me deprime, detesto los meses que se me van, y yo me quedo callado como sino tuviera algo que decir, como sino quisiera hablar, escribir. Pero tanto que decir y tan poco tiempo, tanto que escribir y no sé por donde comenzar.

Podría comenzar por mi felicidad y concluir con mi depresión que se extiende mes a mes, podría comenzar por ti y terminar con el nunca fuimos el uno para el otro, podría hablar de la paz que siento y finalizar con el caos que me hace ser la persona que soy… Los meses se me van y si no duermo, no puedo soñarte, ya no sé imaginarte despierto, pero dormido no vivo, ¿Qué hago?, vivo sin ti o sueño contigo.

Ya no se siente igual, contigo o sin ti, no se siente igual, tampoco se me ha dado bien eso de mirar atrás y conseguir volver a ese tiempo en este espacio, no soy de los que deja las puertas abierta, no soy de los que retrocede, ya recordar no es vivir, por lo menos no en mi caso.

Y prefiero morir sonándote todos las noches, que vivir muriendo a tu lado todas los días.

lunes, octubre 31

Octubre Te Fuiste, Paranoicas #25

07eddfaf2d1adc90bc095b33fb2a3da53647cb99_m

A pocos minutos de un Noviembredistinto”, te fuiste Octubre… Te fuiste y me dejaste un sueño inconcluso, unas noches absurdas de agonía, y un casete viejo porque el carro no tiene reproductor de cd.

Te vas, aunque intenté darle sentido a tu presencia, pero tu presencia no tuvo sentido hasta que te fuiste… Pero si te vas a veces se siente como si nunca viniste, pero cuando vienes no se siente nada. Quisiera poder entender que quiero más, a tu ausencia porque puedo extrañarte o a ti porque puedo no extrañarte… Sé que se me hace más fácil quererte cuando no estás, y tu ausencia me hace mejor compañía.

Por el contrario cuando estás, entonces es la muralla, el tocarte en pensamientos, mirarte de lejos, sentirte tan cerca y sin embargo no hay chispas, no hay pasión. La realidad no es como en los sueños, donde te beso y todo se detiene, aquí ni se detiene el tiempo, ni puedo besarte, ni existen los finales felices, Octubre te fuiste.

viernes, octubre 28

Pensarme, Xtraviada #4



¿Dónde estás?... ¿Dónde estoy?... ¿Te busco a ti o me busco a mi?... Ya no quiero perseguirme huyendo de mis acciones, ni tampoco pensarte más si eso significa pensarme a mí. De todas maneras quién hablo de un final feliz, hablaré mejor de un ahora, sin más mención del tiempo que su propia presencia que embarga cada espacio.

Desapareciste, y poco a poco desaparecí. ¿A dónde me fui?, ¿A dónde te fuiste?... Lejos de aquí creo, o más cerca donde ya no puedo verte o verme. A lo mejor fue otra vez a mi mente o quizás a más internamente. Donde muchas cosas dejan de tener sentido o realmente llegan a importar alguna vez. Y jamás volverás, ¿Jamás volveré?, no lo sé, no quiero seguir pensándome si eso significa pensarte. Me extraño, te extraño, ya no hablo, ni me hablas, ya no hablamos. ¿Realmente importa?.

Repregunto, lo que preguntas y no consigo responder y de ti no consigo la respuesta, no más bien de mí, no quiero avanzar, tampoco retroceder. Sólo mantener este momento, este espacio de incierto y desacierto, de vacío y saciedad, de absurdo dolor y grata alegría, pues como alguna vez creí decir, no siempre seré yo el más honesto de todos, y no quiero escucharte si eso significa escucharme.

domingo, octubre 23

Las Decisiones Que Tomé, Paranoicas #24

a67e094fd2088acd5890d3325d9a0458527fd81f_m

Es inevitable que de vez en cuando, me halle en mi habitación siendo un manojo de muchas cosas y de nada al mismo tiempo, me halle con esas increíbles ganas de dejar salir todo y flotar, de dejar correr todo y volar. Pero nada sale, nada corre, y ese río queda dentro, y ese mar queda oculto.

Es inevitable entonces pensar en las decisiones que tomé, en los errores que me han traído hasta esta habitación donde el tiempo pareció detenerse sin previo aviso, donde tus ausencias se notan, se sienten, y podría afirmar que las puedo oler… Pero, es esa melancolía la que mata, es ese sentimiento de “¿Qué pasaría si…?, si todo fuese diferente”. Pero no es diferente, y nada pasó, el que quema.

Y no te quema mi ausencia, ni mis silencios, ni mis miradas, ni absolutamente nada que tenga que ver conmigo, pero es como una vez dijimos y que a veces me cuesta aceptar Evolucionar constituye una infidelidad con todo lo demás”, y también te dije: “Deberíamos permitirnos una infidelidad diaria, de esas esenciales, clavarnos un cuchillo en nuestra propia razón, traicionarnos...”, y nos traicionamos de eso estoy seguro, y fuimos infieles.

Es así como uno termina en una habitación fría, donde me halle pensando en ti, con esas increíbles ganas de dejar salir todo y flotar, de dejar correr los sentimientos y volar, pero nada sale, nada corre y no vuelo, por eso siempre es inevitable pensar en las decisiones que tomé, pero también traicionarse es un acto de fe.

domingo, octubre 2

Como si nunca hubiera existido, Xtraviada #3

b5852889295172d6f43b19685d644143c55abb9f_m

Alguna vez me contaron varias cosas, cosas que no quería creer pero que hoy recuerdo claramente.

Una de esas cosas fue que Él hizo lo que debía hacer, lo elimino de sí. Desterró cada detalle presente, y quemo todas y cada una de esas cosas que le recordaban recordar, cosas que imposibilitaban su posibilidad de seguir. Él estaba cansado de participar, de querer y al final nunca pudo hacer lo que quiso hacer.

Pensó, pero pensar no fue suficiente, y espero pero después de tanto esperar, decidió no continuar esperando. Se hizo largo el camino, pero la llegada fue corta, después de haber recorrido tanto y tanto, el final pareció extrañamente cercano. Se dijo que nunca más volvería a permitirse tal desenlace de hechos... No existió, ni existirá eso que Él estaba buscando, se repitió que nunca fue hecho para soportar de manera tan continua, completas decepciones.

Pero Él no fue capaz de hablarlo, tampoco fue capaz de protestar, simplemente dejo que todo pasara, simplemente se resigno hasta que se alejo, se alejo sin decir adiós, sin medir palabra alguna, tampoco fue capaz de gritar, pero si acepto su equivocación, lo supo, y aprovecho un desliz del tiempo, para desaparecer en el aire, como si nunca hubiera existido.

lunes, septiembre 26

La Utopía, Súperhistoria #28

4cc1c022e424914385b61437abf5d4aceceadeb7_m

Me gustan las historias largas, cuando un día que te pregunté como llegaste hasta mi y me respondiste: “es un cuento muy largo” y tuve todo el tiempo de mi vida y más para escucharte. No tuve miedo de sentarme a tu lado y quedarme para siempre, ese siempre que se hizo eterno, y la eternidad no fue suficiente para permanecer juntos.

Tuve miedo que un día se acabara la historia, o se nos acabara el tiempo, y a mi aún me quedaran energías para aferrarme a ti, y no soltarte, jamás soltarte, hasta que mi piel se hizo tu piel, y mi carne se hizo la tuya, hasta que nos soldamos mutuamente el uno al otro, fijándonos para no separarnos.

Las historias de amor no fueron diseñadas para que yo participara de ellas, pero contigo, contigo no hizo falta pensar, contigo no hizo falta hablar, entraste y te quedaste, entre y me quede, y nos sentamos y nos quedamos para conocernos y entendernos… Permitiste que mi música tocará tu cuerpo, permití que tus palabras vigilaran mi sueño, escuché atento las historias largas que tenías para contar.

Pase de ser un espectador a ser el héroe cliché de una historia cliché con un final cliché, pero yo era muy feliz viviéndolo contigo.

martes, agosto 16

Quitarme el Aliento, Súperhistoria #27

2a5c8620d7127d5f940e4948531910d4e3e96b83_m

En mi mente siempre tuve esta imagen de una casa perfecta, con techo de lajas rojas, un gran jardín con mucha grama la más verde del lugar, grandes ventanales, una barda blanca, un perro o tal vez dos, tres hijos perfectos, un carro familiar, y una bella esposa, perfecta por supuesto, con buenos trabajos ambos, niños que practican deportes, aman las artes y tocan algún instrumento, presidentes de sus clases… Una vida perfecta, con títulos, doctorados, lo que sea, por supuesto jóvenes y felices también.

De repente, , totalmente diferente a lo que tenía en mente, a lo que podría imaginarme, yo pensando en el futuro, sin saber bien que estoy haciendo en el presente… Me provocas, me tientas, me desesperas, me quemas, me congelas, me matas y revives, te deseo, te muerdes los labios, me tocas, te acaricio, te respiro, me abrazas, me encadenas a ti, me niego a seguir, me atraes nuevamente, volvemos a comenzar, y yo con ganas de entrar en tu mente, con ganas de entrar en ti, de hablarte desde adentro, de dejar pedazos de mi allí, en tu interior.

Te haces la loca, disimulas, te callas, juegas conmigo, me tocas y llego al cielo, te toco y no tengo certeza, ¿Qué te produzco?, ¿A dónde te llevo?, ¿Qué te imaginas cuando me dejas tocarte y cierras los ojos, y te haces la dormida?, y yo a tu lado, bien cerca de ti, me pego a tu cuerpo, te beso, y mis manos no pueden ir más allá de tus límites, no pueden tocar lo prohibido, no pueden acceder a esa parte de ti que no compartes con cualquiera, y mis dedos sufren, y yo sufro, y si no te toco muero, y si te toco también lo hago, no tenerte me turba, tenerte me nubla.

Y mi futuro se ve distinto, no hay casas perfectas, ni niños perfectos, ni esposa perfecta, pero vivo el momento, y no sé si vivir el momento es lo que deba hacer, quiero contigo todo y nada, todo lo que puedas darme, nada que pueda borrarte de mi. Quiero contigo siempre y nunca, siempre los dos juntos, nunca olvidarte. Pero este camino no sé a donde me lleva, tus acciones no sé a donde me llevan, mis reacciones no sé a donde me llevan, pero me arriesgo, por ti me arriesgo, sólo tienes que venir a quitarme el aliento.

jueves, agosto 11

Me Deprimo, Paranoicas #23

a250610265ec5357a37ebafa3126b2dba5beaf7b_m

Como es costumbre me pongo mi pantalón, ese que uso para las depresiones, y me coloco esa franela blanca -que ya no es tan blanca- que queda bien con el pantalón, y me dedico a deprimirme, a dejarme caer, descender, dejar que la ansiedad me comience a carcomer, que se sienta que no tengo el control, que he perdido por un rato la razón momentáneamente.

Tocar fondo es el objetivo, que el miedo sea más grande que la misma ansiedad, que mis manos suden sin control, y de poder medirse mis niveles anímicos estarían en negativo. Y es cuando dejo de mentir, -en condiciones normales no siempre miento- ¿Esto es lo que quieres?, pues precisamente esto es lo que soy, una bolsa de huesos, sin carne, sin piel.

Una soledad que después de ser una decisión de vida, se ha convertido en una maldiciónde vida-, hay algo mal, en mi hay algo mal, pero sí con está soledad me va bien, ¿Por que cambiar?… No quiero tener que mirarme al espejo todos los días, intentando ver algo que todos los demás están seguro que soy, que yo no puedo ver… Buscando un “yo” que no aparece frente a mi, y lo único que se refleja en el espejo son mis barreras, mis miedos, mis inseguridades. Esta falsa felicidad, que me tiene tan feliz, que no me deja ver lo infeliz que soy.

Debería quemarme la lengua por ese montón de mentiras, pero se entiende nací inconforme… Pero me decido esperar, porque para esperar no se necesita nada especial, solo perder el tiempo, así no sufro, no pasa nada, me quedo en tiempo fuera, con todo ese montón de segundos que se acumulan, y los utilizo para deprimirme, para llegar al fondo del pozo, y descansar, para auto compadecerme, y decirme “No todo está tan mal”, “Eres muy linda persona”, como si eso fuese suficiente.

Pensar nunca me resultó útil, hoy no es la excepción…

domingo, julio 31

Ya no te pienso, Paranoicas #22


a4a3bea7c5cc1c184767fb3a91802da6ef84b9b8_m

Espera… Dame un momento…

Un momento, déjame pensar.
Un momento, déjame recordar.

Regálame un segundo, déjame escribir, déjame actuar en rebeldía, que mis pensamientos regresen, y el olvido sea una pared que los recuerdos puedan saltar… Escribir es gritar sin piedad al olvidorechazarlo contundentemente.

Me diste tu paciencia, yo te dí mi amargura.
Me diste tu sonrisas, yo te regalé mi sarcasmo.
Me diste tus caricias, yo puse mi frialdad en cajas de regalo y te las di a ti.
Me diste tu alegría, y yo pensé en el tedio.

Pero te seguí pidiendo, y tú me seguiste complaciendo… Pero era una cuestión de ti, de lo que eras, de lo que hacías, de tus actos, de tu hermosa manera de estar sin estar, de vivir eternamente en un lugar diferente, mientras todos los demás atados a la tierra permanecimos, eso me gustó al principio, luego me cansé de pensamientos bonitos, de realidades inventadas, de sueños inalcanzables, de palabras huecas, vacías, absurdas… DESPIERTA, no estamos en el país de nunca jamás, está es la realidad y yo no te quiero, y tú no me amas.

Callaste tu amargura, para escucharme hablar de mi felicidad.
Guardaste tu soledad, para brindarme tu compañía.
Quemaste tus melancolías, para reírte de mis malos chistes.
Saltaste tus reglas, para aceptar mi filosofía.
Jugaste a ser libre, para acompañarme en mi aventura.

Pero… Yo no quería nada de ti, esa ilusión desapareció, se esfumó, nunca existió. Nunca te quise, y pienso que nunca me quisiste para sentirme bien conmigo, para creer que fue un engañarnos mutuamente, un decirnos sin sentir, un sentir sin decirnos. Nunca tuve miedo de que las cosas salieran mal, tengo esa extraña maña de que todo me salga así, a lo absurdo, a lo tonto.

Y te hablo para no escucharte, porque no quiero que argumentemos a favor de un sin razón, de intentar lo imposible, porque sé que somos amantes de lo difícil, de lo complicado, de lo complejo, pero me voy a lo simple, y renuncio a cualquier acción que vaya en contra de mi decisión de cerrar esta puerta, y no abrirla más…

Ese camión de imágenes que abarcan mi vida, mi día a día, cosas que no te incluyen, y no te traen en recuerdos, que se me olvida hasta tu nombre, que no recuerdo tu número de teléfono, o si tienes un lunar en forma de corazón en algún lugar de tu cuerpo, porque ya no te pienso.

viernes, julio 1

Un Mes En Blanco, Paranoicas #21

6e135eae1eda8a2df39b58523c05fab3624f4172_m
Junio no existió, se acabó Mayo y al día siguiente era Julio. ¿Qué pasó?, ¿Qué te hiciste?… Me pase los días analizándome, buscando por fin un resumen general de los acontecimientos recientes, algo de donde poder agarrarme y sentar un punto de retorno y no tener que volver al principio, salvar el documento, hacer un check-out, un punto de recuperación, pero más allá de eso el mes no existió.

Me pase el mes siendo el pasajero, y sólo el pasajero de un viaje que no sé a donde me llevaría, mirando por una ventana a merced del tiempo temperamental tan propio de nuestras tierras, intentando comprender lo frágil de la existencia, y lo poco que comprendo eso palabra, existir… pero, ¿Cómo es no-existir?, y ¿Qué es la existencia entonces? –Generalmente es más fácil explicar el concepto de alguna cosa con su antónimo, cómo la oscuridad que es ausencia de luz-.

Tuve sueños, tuve días, también tuve noches, tuve mensajes de texto y llamadas, tuve películas y música, tuve lluvia, de esa tuve bastante, tuve días soleados, pero en definitiva no existió, fue un mes en blanco, no hubo narrativas, no hubo historias, ni sueños, ni esperanza, sólo existencia.

Quise tener un mejor motivo para explicar el silencio, pero no lo tuve, por eso callé, luego quise tener un mejor motivo para explicar la ausencia, pero no lo conseguí, por eso me fui, finalmente quise tener un mejor motivo para escribir antes, pero no lo encontré, por eso no escribí, y así se pasaron los días, y entre más esperamos, más difícil –Por eso será que la muerte al final del día siempre es más complicada que al principio-.

La sencillez es como el color blanco y así fue Junio, tan complicado que es difícil de explicar por eso será tan sencillo mostrarlo… Así fuiste, blanco totalmente.

viernes, mayo 20

Me Gustan Los Imposibles, Súperhistoria #26

0ab64b591abf8e4f84495ddfa012e76022bdc196_m

Los abrazos que me prometiste los tengo guardados en un rincón de mi habitación, para cuando quiero volver a pensar en los momentos que yo alguna vez imaginé, pero mi piel se quema y tú nunca la tocaste, pero mi piel se consume y tú nunca la sentiste… Yo nunca te sentí, no te toqué, y morí todas las noches, imaginando estar junto a ti, imaginando tenerte a mi lado, imaginando ser un sólo cuerpo, y que día tras día me negarás, y nos negarás lo que en sueños nos dedicamos a formalizar.

Los besos que me pediste y que nunca tuve el valor de darte, esos los tengo conmigo, esperando que un día vuelvas como cosa tuya, y los quieras de nuevo, y los mantengas contigo… Porque fui un cobarde, y dejé que tus palabras fueran más importantes que mis sentimientos, dejé que tu orgullo pasará por encima de lo que siempre quise decirte, pero que nunca sentí oportuno.

Pero ya no quiero más momentos angustiantes, donde sólo me dan ganas de hundirme en mi cama, y que me trague y desaparecer, porque no sé me ocurre que decirte, callarte para siempre, no escucharte decir que calmarás mis miedos, acunaras mis sueños, y permanecerás conmigo para vigilarme mientras duermo, pero te has encargado de ser el tic-tic-tic-tic-tic que perfora mi cerebro y no me deja concentrarme.

Quiero al menos de ti, un día que me haga feliz, una oportunidad para hacer todo diferente, un abrazo que me haga sentir seguro por lo menos una vez, y un beso que te demuestre que lo que nunca fue, tal vez era lo mejor, pero así constatamos que somos personas diferentes y lo que yo me maté día a día imaginando era simplemente un imposible.

jueves, mayo 5

Ya No Estás Tú, Súperhistoria #25

b826320021d43815cef342a463e6cd1deb949198_m (1)
Ese día busqué esa imagen de ti que nunca pudiste reproducir, busqué también esas palabras que alguna vez escribí pero que nadie leyó, busqué los miedos que escondí bajo mi cama en un baúl de madera, busqué tus sonrisas esas que nunca fueron conmigo, sonrisas ajenas pero que robe y guarde en un sobre manila detrás de mi biblioteca, entre Paula el libro de Isabel Allende y el Inventario Uno de Mario Benedetti.

Busqué las pocas palabras que cruzamos un día de enero que ya no recuerdo bien, intenté buscar el lapiz que un día por amabilidad me prestaste pero que nunca intenté regresar, no busqué la última vez que te vi, tampoco busqué el odio que sentí el día que decidí que ya no te quería más, pero si busqué los besos que imagine darte un día que cerraste los ojos pero nada pasó, y los abrazos que en sueños me diste, lo cerca que te tuve una vez y el día que pensé que comprendías lo que sentía por ti.

Y sé que te gustaba mirarme cuando yo no te miraba, y en mi descuido me quisiste, en tu locura te amé… Te tuve en la punta de mi lengua, y periódicamente recuerdo tu nombre como extraña costumbre, con ganas de buscar recuerdos vagos de los segundos que nos cruzamos sin saber que te pensaría tanto después.

Ese día tuve ganas de pensarte más que nunca, de entender el por qué te tuve y no te tengo, el por qué de mi ausente vida y la tortura de una realidad que no suena a real en absoluto porque no estás tú, ya no estás tú.

sábado, abril 9

La Suma de los Días, Paranoicas #20

de41b0569d78df64bb2bd2be60022a217f8e979f_m
Mi realidad es la suma de mis sueños, suelo pedirme perdón por mi poca preocupación por olvidar, es ese miedo a no recordar nada jamás, y tener entonces que inventarme otra vida. Te imagine pensando, me pensé imaginando, ¿A dónde se fueron esos sueños?, ¿A qué lugar del mundo fueron a dar mis promesas cumplidas y no cumplidas?.

Lo que soy, no es más que la suma de mis partes, de mis ayeres y mis mañanas, el hoy, el presente, el ahora, es un rincón que no está vacío, que no está lleno, que estoy yo y el montón de cosas, recuerdos y momentos que me constituyen como persona, los dones y virtudes, pero más que todo defectos, mis imperfecciones, y mis silencios, todo eso y más, también lo que callo, lo que pienso y jamás diré, y lo que grité y gritaré también.

Llegar a cierta edad, es llegar a la suma de mis conclusiones, a la catarsis, a mi, llegar a mi. Yo soy ese que no se come las aceitunas, ese que cada noche antes de dormir debe arreglar la cama, que escucha música para programar, y jamás conseguirá el algoritmo perfecto para ser tan puntal como debería serlo, y he descubierto que he encontrado más de mi en ti, que en mi. ¿Quién es mi?.

Termino en esta habitación plana, vacía y que tan poco me describe, para tener un día más cerca al final, y un día menos de vida –si lo vemos en conteo regresivo-. Yo soy el que siempre se pregunta ¿Qué hemos hecho?, nosotros ¿Qué hemos hecho?, y sólo puedo sonreír, soy todo lo que he vivido y más, soy la suma de mis días.

sábado, abril 2

Quiero Decir, Paranoicas #19

a23037308ab8d928cb6597e621865f6eade2f211_m

Siempre pienso, me gusta pensar, pero detesto pensar… Siempre tengo un discurso preparado, que jamás uso, por temor a confundirme, a olvidarme, a enredarme… En realidad a entender que todo lo que estoy diciendo no es más que una mentira, y no creerme mi mentira, me da miedo. Ese discurso en el que pierdo tiempo, ordenando palabras, que en algún momento esperan salir, ser libres por fin, pero nunca de mi. Siempre tengo que decir, pero no digo nada, me da miedo perder, me da miedo sufrir, prefiero callar, que el silencio diga lo que tenga que decir.

Hoy ya no siento nada, pero escucho tu voz, que me dice lo mismo… Y yo me cansó, y me voy, no quiero comenzar a recitar mi discurso final, ese que tengo guardado desde hace meses atrás, una mentira grabada en mi mente en forma de recital, un montón de palabras para no decir nada, para dibujarte un final que sepas entender, un se acabó que quieras escuchar, un hasta aquí que quieras aceptar… Pero pensando en mi, no puedo permitir seguir pretendiendo ser el ciego de los dos, jugando a no verte más.

Y no es fácil –y tampoco quiero ser la víctima aquí-, pero tú puedes pensar lo que quieras, yo no sé como haré para comenzar a sacarte de mi, olvidarme de todo, poner cada recuerdo en una cajita de zapatos, y enterrarla en el jardín de tu casa –porque en mi casa estaría tentando abrirla cualquier día de debilidad-.

En mi mente vienen y van tus palabras de siempre, que conmigo tu vida pasarías… Y yo sólo quiero perderme, encontrar la salida, no equivocarme más, huir y nunca volver. Sé que para ti, es más fácil decir que me equivoque, que quieres vivir el pasado otra vez. Pero todo cambio –cliché necesario- para que por fin quieras escuchar, lo que te quiero decir, y es que yo contigo no quiero vivir.

viernes, marzo 11

Para mi vida, Paranoicas #18

7cc6fc6e6c4e6ae93485e18c80dcbadf85d174b9_m

Que las cosas sean iguales, sólo es síntoma de que algo no anda bien. Siempre tuve ese miedo –que aún tengo– despertar un día cualquiera, y darme cuenta que con mi vida no he hecho nada, mirar en la gaveta de esa mesita de noche –que un día compre sólo para ocupar un espacio en esa habitación semi-vacía– y ver esa larga lista de cosas por hacer, que no hice.

Pero poco a poco he cumplido mis metas, ir tachando una a una esas cosas que tengo pendiente por hacer, al fin y al cabo construir la persona que miro al espejo diariamente al levantarme. Escribo porque necesito expresarme, y me leo precisamente para poder conocerme. Para mi vida he conseguido un montón de razones para continuar…

No sé cuál es la razón real de esto, tal vez quiero llenar un espacio en este blog, quiero tener en otro lado que no sea mi mente esto que pienso, y pienso que no es nada fácil esa sensación cuando te caes y necesitas irremediablemente levantarte, pero sonreír, porque la felicidad va mucho más allá de las situaciones reales, y la realidad es tan moldeable como queramos que sea, por eso soy esto, pues esto es lo que quiero ser.

Ha sido todo un desafío este auto-descubrimiento, comprender-me, escuchar-me… Para mi vida todo eso que me haga sentir vivo, y vivo es como quiero permanecer mientras hayan cosas en esa lista. Concluí que tengo que destacarme con estás palabras, para mañana saber quién era yo hoy.

Para mi vida, que las cosas sean diferentes constantemente, nada de víctimas inocentes, ni mucho menos personas ausentes… Para mi vida, es el levantarse todos los días sabiendo que hacer, sin tiempo, ni remordimientos, que esto sólo sea referencia de mis constancia y ganas de ser mejor cada día, y hacerlo mejor cada día.

martes, febrero 22

Lo que eres tú, lo que soy yo. Paranoicas #17

85d7274a25122ad027a2f54d1435fe9b210153fb_m
Por cortesía siempre hablamos al final de nosotros mismos, comenzamos por los demás, por sus virtudes, luego por sus defectos, hablamos de lo que son, y de lo que sentimos por ellos, luego hablamos de nosotros, de nuestros sentimientos, de la persona que creemos ser, de la persona que queremos ser, nunca de los errores, nunca.

Hoy te dio por sustituir mi sombra, por ser esa mancha de aceite en mi franela favorita que quedó arruinada, y que jamás volveré a usar en público. Eres lo que nunca quise decir, eres esa parte de mi que nadie conoce, un estorbo ante los ojos ajenos, ese terrible deseo de persistencia, de constancia y persecución, eres mis noches cálidas, y los sentimientos agotados, te convertiste en esa melodía constante por no decir ruido de fondo, esos cabellos olvidados en mi almohada, o el dinero que boto constantemente, eres los puntos suspensivos de esas frases inconclusas que buscan decir algo.

Soy esas ganas de "te amos" que ambos quisimos decir, pero que el tiempo nos ganó, como siempre sucede, soy la ausencia de mi propia voluntad, y también soy tus ganas de besar, soy tu piel y mi piel, soy tus sonrisas a medias, y esos ojos expresivos, soy mi propia soledad, soy la distancia y el silencio, sobre todo el silencio, soy esas palabras que nunca se escribieron y soy esas noches heladas, porque recuerdas, yo siempre fui lo frio y tú lo cálido.

Soy las palabras hirientes, las malas noticias, tú, en cambio… Eres la sorpresa, el accidente cuando dos almas destinadas a no estar juntas se encuentran y se aman, como si debieran. Yo soy la ruptura, cuando se dan cuenta que nunca debieron conocerse, y nunca debieron estar juntas, ni amarse, ni tenerse… Pero nos rehusamos, siempre vuelves, eres el fantasma que regresa para contarme como le va, yo en cambio soy tu cable a tierra, tu conexión con lo real.

domingo, enero 30

Ya no te quiero, Súperhistoria #24

7412d1dde6af57110912c1064a994600313a40da_m
Cuando te dejé de besar, comprendí que ya no sentía nada. Nacieron dudas, ¿Alguna vez te quise en serio?, y todo lo qué te dije… ¿Fue real por lo menos una vez?… No lo sé, no lo entiendo, no consigo una respuesta satisfactoria que tú necesites, la respuesta que ahora necesito para explicar lo que siento, o lo que ya no siento.

Ya no te pienso, eso siento, siento que ya no estás aquí, en mis pensamientos, ya no te sueño, ya no te quiero, y tristemente esto entre nosotros se ha convertido en un montón de “ya no te…” que no consigo donde guardar, o que hacer con ellos, si quedármelos y añejar esas ausencias, para creer que algún día podré sentirme mejor, o meterlos todos en una gran bolsa y botarlos al rio ese que ya no lleva agua, y esperar a que desaparezcan como desaparecen las ilusiones, como desapareció ese amor que creía sentir por ti.

Cuando te dejé de abrazar, no sentí nada, y te volví abrazar, pero no sucedió, nada sucedió, y sin querer comprendí que tú, tú ya no eres lo que yo amaba, tú nunca lo fuiste, sólo me gustó engañarme mientras pude, pero terminé por golpearme con la realidad. Ya no te quiero, nunca lo hice en verdad.

sábado, enero 22

En mis piernas, Paranoicas #16

4f2a770737ba25a3487284e398e8702bd165644b_m

No tuve que inventarme una película francesa en mi mente, ni mucho menos esperar una señal en la ventana de mi habitación, ya lo sabía, sabía que te quería a ti, que te quiero a ti… Todo el tiempo estoy pensando en ti, no es como pensar en ti, es PENSAR EN TI, es diferente, del cielo a la tierra y de regreso, es diferente de todas las formas que te puedas imaginar, contigo es diferente.

No tuve que traerte en pensamientos, ya estabas aquí, junto a mi, y todo ese tiempo que nunca te vi, fue como que nunca existió. Sobre mis piernas te quiero tener, abrazarte a mi y no dejarte ir, sentir tu piel, mirarte a los ojos, esperar que de ti salgan esas palabras tan esperadas por mi, con esa sinceridad presente en tus ojos, y mis anhelos se hagan tuyos, y mis sueños se hagan de ambos, que tu vida sea mi vida, para así no perderte nunca.

En mis piernas te tendré cuando necesites que te de calor, cuando quieras hablarme, sentirme, besarme, quererme, sobre todo cuando quieras quererme, y no sé si me cansaré de mirarte, pero no pienso en cansarme pienso en mirarte, y poder entrar en ti para llenar tu alma y que llenes la mía, para unirme a ti de la única forma posible, y ser uno siendo dos.

No sé cuántas veces imagine este momento, y cuántas otras veces pensé que nunca podría cumplirse, y creo que con decirte te quiero no me alcanza, en mis piernas te quiero tener indefinidamente, pegada a mi, con mis manos en tu cintura, tus manos en mi cuello, y mi cabeza en tu pecho, bésame ahora, bésame ya, si me muerdes no diré nada, pero tengo que confesarte que te siento hasta en mis huesos, te siento recorrer mi cuerpo, te siento, en mis piernas te siento.

viernes, enero 21

Borrando un Cliché, Súperhistoria #23

c081d487b94b860707e96cfbc2c6d0a4f055b8df_m

El día que me amaste, ese día era demasiado tarde¿Cómo pretendes venir a mi con semejante cliché?, yo no creo películas tontas, de esas que hablan de amor y sus finales son tan utópicos, esa no es nuestra historia, tampoco creo en esas otras películas donde todo lo bueno le pasa a la gente buena, pero nunca, nunca, nunca, nunca, se han parecido a mi vida, un cliché fue ese momento, que pretendiste borrar con intenciones lo que hiciste con hechos…

No viviré de intenciones no-cumplidas… Ese día que tocaste a mi puerta y dijiste: “Cometí un error, y alguien como tú jamás encontraré”. Ese día ya no me acordaba de ti, había recogido eso poco que me diste, y había borrado ya esos 5 minutos de tu vida, que te dignaste a regalar-ME, continuaste con un: “No me di cuenta antes, eres lo mejor que me ha pasado, y no soporto que no me quieras más”… Creo que jamás te quise de verdad, pero me daré el beneficio de la duda.

Pensé en los errores, y en como nos gusta revivir una y otra vez lo vivido, pero yo no soy de ese tipo de personas, y sencillamente no, no hoy, no yo, no quiero. Te dije adiós, y no tengo ganas de cambiar de parecer, no acostumbro a cometer el mismo error. No quiero engañarme con falsas ilusiones, no diste todo de ti, y ahora la soledad te está matando, y en tu mente me tienes como tu salvador.

Y en mi tonto descanso, concluyo firmemente que no quiero que vengas hablarme, cuando no soportes el silencio, no seré ese ser que te llene el vacío, que calme tu terrible ansiedad, no quiero que me digas que me extrañas, sólo porque extrañas que te quieran, porque ya en la noches no consigues quién te abrace, y te diga en susurros cuánto podría hacer por ti, pero yo no haré nada. No quiero que te acuerdes de mi, cuando recuerdas que nadie se acuerda de ti, y te encuentres en una habitación vacía, sola, pensando en las cagadas que te mandaste.

Quise sentirte en mis huesos, pero cuando te necesite, no estuviste, pero yo nunca estuve solo y sin embargo te quise conmigo, pero nunca llegaste aparecerAprendí a dominar el silencio para demoler la barrera que al conversar nos separaba, pero nunca quisiste ver de este lado de la barda, y así nos quedamos en silencio. Te extrañé, porque así sabía que te quería, ahora ya no lo hago, no te extraño, ni te pienso, saca tus conclusiones.

Por eso dije: “Ya es demasiado tarde para lo que dices, mejor márchate.”, me pareció la mejor manera de tirarme está situación, y concluir como empezó con un cliché.

domingo, enero 16

Me fui, Paranoicas #15

895c74f9aacfdfdf754079bd756488646bd773d5_m

Agarré mis corotos y me marche, no tuve ganas de estar peleando con mis pensamientos, no tuve ganas de sonreírme y parecer menos idiota, no tuve ganas de verme al espejo y descubrir está cara de pendejo que tengo desde hace días atrás, por no dormir bien, por pensar que así era como debía ser.

No te creí cuando dijiste “Te quiero, coño”, está vez no lo creí, tampoco me creí cuando pensé en quizás nuestros caminos pudiesen cruzarse después, no me creí. Quisiera creer, cuando pienso en que podría cambiar –por ti-, pero por ti no lo haré, tal vez ni siquiera cambie por mi, no lo creo.

Tiemblo, no sé si es por el frio o por las ganas de despertar a tu lado, deseando sentir tu calor sobre mi… Quiero que a este rompecabezas, le cuadren las piezas, ser yo la parte que te falta, que seas tú la parte que perdí. Pero entre lo quiero y la realidad, existe un abismo insalvable.

Pero no soy, ni seré el que de su brazo a torcer, tampoco miraré atrás y respiraré profundo una y otra vez, porque no quiero pelearme con mis pensamientos –Otra vez-, no tengo ganas de mirarme al espejo y sonreír para sentirme menos idiota, aunque me veas más estúpido sonriéndole a una imagen vacía, sonriéndole a una imagen sin alma, ausente/presente.

Tiempo es lo que no te pedí, tiempo es lo que no puedes darme, y no suelo pedir imposibles, aunque suelo tener una fijación por cosas imposibles, suelo pensar que un día viviré en un mundo aislado donde todo será como debía ser, pero las cosas ni serán, ni ese lugar existirá. Simplemente no esperaré más por ti, me fui.