domingo, abril 25

Sin Motivos, Súperhistoria #13


No es complicado saber porque dicen que la vida es pura ironía, y es que si de mí dependiera te daría mi vida, así te darías cuenta de que hablo cuando digo que no existe ironía más arrecha que la vida misma. Esta historia la contaré sólo una vez y espero exorcizar cualquier fantasma que pueda quedar, dame un motivo, dame una razón para comenzar… El motivo fue amor, te conocí, me conociste, o por lo menos hice el intento de hacerlo, del cual debo decir que no me arrepiento. Descubrí el verde de tú vida, el chocolate, la arena, y el montón de sueños y fantasías.

Avanzar crecer, querer, soñar, echar pa’lante, todos sinónimos de tu nombre. Descubrí la D y con ella soñé, un mes, dos meses, algo sentía allí, y eso que hasta entonces ni un hola de boca a boca se había dado, otro día, otra noche, otro sueño, otro sol, otro día y sin pedirme que me quedará, lo hice, no necesite un motivo, una razón… Noches en las que mi luna soñaba con la tuya, y me decía que eras tú, tú a quién yo esperaba. Otro día, otra noche, y es que nunca podría terminar si todo lo que vi en ti me pusiera a contar, entre tus defectos, entre tus virtudes, pude ver hasta dónde me fue posible ver.

Pero todo lindo comienzo, tiene un final poco feliz, y es que este cristal que yo me había inventado, me había explotado en la cara… Con un rotundo “no” me despejaste de esperanzas y con un “no eres suficiente” mataste lo poco de mi que aun quedaba. Y si te digo que jamás te pensé, te mentiría, y si te digo que jamás te soñé, no me creerías, supuse muchas cosas entre ellas el hecho de que existía otra persona, tuve razón y no aparecí por aquí hasta mucho tiempo después, tiempo donde te imagine imaginándome, por la calle te conseguí, pero que puedo decir, el loco me hice y no por ti, lo hice por mí.

Y si te digo que no te pensé, te mentiría, y si te digo que no te soñé, no me creerías. Un año después nos volvemos a encontrar y a decir verdad yo sin esperanzas estoy ya, pero comienzas hacer cosas que me confunden, luego una noche decides hablar y sueltas tus sentimientos los cuales con mucha atención procuro escuchar. De tu mejor amigo te habías enamorado, muchacha deprimida, también me contaste que con él vivías, pero que todo pronto acabo y que triste estabas hoy, que pronto sería tu cumpleaños, y ese día él un regalo te había dado, tu primer beso. Fue allí cuando dijiste “Esto es amor del intenso”.

Yo no lo podía creer, tu mejor amigo y tú, no podía ser. Como buen amigo que estoy acostumbrado a ser, te aconseje, y supongo que tu mejor amigo en ese momento fui yo, pues cuando me dijiste gracias, yo te dije de nada, fue allí que te dije que en verdad te quería, y en tu búsqueda de un buen párrafo para decir adiós, sólo de ti salió un gracias nuevamente. Yo me fui sin decir una palabra más, pues el amor no se recibe, simplemente se da.

lunes, abril 19

Lo Que Siempre Fue, Súperhistoria #12

Lucas con varios años de edad, los adecuados como para saber perfectamente que significaba amar, a pesar de que pocas personas le habían abierto su corazón. Absurdamente tímido y silencioso, para algunos sólo una sombra más al final de la imagen, un paisaje que se confunde con el paisaje, con las ramas y las hojas, con el viento, el sol y el mar, la arena dónde millones de palabras de amor fueron escritas pero no para él, nunca para él.

Lucas, mejor amigo siempre, consejero, paciente, amigable, silente… El perfecto idiota que siempre estuvo, siempre estará. Adonde van a llorar los desolados corazones que rotos están, Lucas los arregla, los motiva, les enseña, les quiere y luego se van. Mejor amigo Lucas siempre será. ¿Quién escucha al pobre Lucas cuándo él quiera conversar?, “La sed de respirar”, “La sed de está turbia soledad”.

Lucas hoy tuvo ganas de amar, pero uno a unos los corazones se van, pobre Lucas que con él nadie quiere estar. Y no sabe de dónde viene ni a dónde irá a parar; hoy Lucas se enamoró pero pronto pasó lo que era de esperarse, “Gracias” dijo un tonto corazón “Siempre serás mi mejor amigo”, y con eso mataron su tonta ilusión. Una vez lloró y lloró, y otro día también lo hizo, luego al tiempo el corazón le rompieron ¿Quién se lo sanará, si Lucas es el que sana y cura corazones rotos?, ¿Quién escuchará al pobre Lucas cuándo quiera hablar?, ¿Quién lo mirará a los ojos, y le dirá que con él quiere estar?, ¿Quién será, el corazón que a Lucas quiera amar?.

Mi Desahogo, Paranoicas #3


Generalmente él se hacía el interesante, sólo y únicamente para decir aquí estoy, existo. Era cuestión de hacerse notar, de ser de aquí o de allá, en realidad no importaba el lugar, la cuestión realmente y poderosamente importante era “Procurarse un lugar”, ser alguien. Tener esto o aquello, o llevar estratégicamente la contraria para tener en sus manos a los otros.

Es ridículo lo sé, ni yo sé porque escribo sobre esto, a lo mejor por lo asombrosamente diferente a mí, a lo mejor por lo poderosamente distinto… No fue un buen comienzo en realidad, y en este momento pienso en “Siempre habrán cosas que decir, siempre”, y lo que pueda parecer importante sería si decirlo o no decirlo… Hoy no tengo ganas de comenzar mi confesión, ni mucho menos proseguir con otro millón de “Porque siempre me llamaste la atención”, no tengo ganas de soltar los “Perdóname” que muchas veces sentí y que jamás dije, porque como ya he dicho, hay cosas las cuales es mejor guardárselas. Pero no te preocupes eso no involucra directamente a mi entorno.

Uno se preocupa tanto por tantas cosas, que comienza a olvidar lo trascendental, aunque cuando uno dice importante hay personas que podrán diferir de uno con respecto a sus prioridades, y bueno no soy una persona que le importe mucho si los demás “aceptan” o “aprueban” mis prioridades, o si les dan el visto bueno, no me interesan.

Y es que no soy una persona que se moleste fácilmente y sé ocultar con clara facilidad lo que siento por otras personas, siempre habrán señales pero lo más obvio nunca es lo más exacto. Vivo de detalles, que transforman mi vida en lo que es, y precisamente eso es lo que soy, el resto sobra, sobran palabras, situaciones y personas. No suelo aferrarme al tiempo, pero no siempre; no suelo aferrarme a recuerdos, pero no siempre; quizás hay días que lo necesito, de resto sólo hago silencio, pues no suelo tampoco referirme a mí, si puedo optar por referirme a ti.

Hoy no tengo un millón de razones pero tampoco las necesito, no hay excusas, ni motivos. Procúrame un tiempo y no te preocupes porque no vas a desperdiciarlo, ahora… Para mi debo procurarme las palabras adecuadas, para ver si por fin puedo procurar enviar las señales adecuadas, y es que finalmente todo esto es: un te doy, tú me das… Lo más difícil sería dar el primer paso, y todo dependerá de la persona que procure dar la primera señal concreta.

martes, abril 13

Tardes/Noches, Paranoicas #2


Todo es más divertido cuando llueve, cuándo gris está el cielo... Soy de los que prefieren gastar su tiempo en eso, en mirar por la ventana, tampoco suelo ser muy comunicativo, por lo menos no hablo de lo que realmente siento o quiero, puedo hablar, y hablar, pero siempre serán cosas tan superfluas, tan de lo común, que quizás no quieras hablar conmigo, tampoco espero que lo hagas, yo tampoco lo haré. No hoy, ni ayer, ni mañana, ni los días anteriores o después del momento en que te preguntes ¿Qué fue de él?, tendrás que preguntarte también “¿Qué fue de mí?”.

No lo haré.

Vino Christine, vino Javier, vino Ricardo, y María Mercedes también, vino el que no tenía que venir, y la que si tenía que venir no vino, vino el tiempo, el espacio, y la dimensión que se acumula en un sólo punto... Así fueron 10 dimensiones, que contienen todo, tus manías, las mías, los atardeceres lluviosos que tanto me gustan, y los días soleados que no me gustan, mi cabello largo y el corto, lo que quiero y lo que no quiero también, las noches, tú vida, mi triste ausencia, entonces se hizo de noche...

Luego dejaron de venir, se fue Javier, Christine, Ricardo y María Mercedes, se fueron... No hubo momentos, no hubo. Simples y largas notas de una guitarra, acompañadas por versos de un chico con acento inglés, de rayos y llanto, de más atardeceres, de casas y circos. Tarde y noche, es cuándo mi humor se desvirtúa, se desvanece cada partícula, cada sensación, se atenúa cada sentimiento, cada respiración. Cuerdas, átame a las cuerdas, no quiero que me llame mi propia reflexión, y me lleve a portarme bien. ¿Bien?, ¿Mal?... Tarde, no hay grietas, no las hay, noche. Pero, ¿Qué está bien?, quizás no yo, ni tú, ya es muy tarde.

Se acabo el tiempo...

Algo que decir # 6

Cuándo se trata de plasmar mis ideas, el tiempo no me alcanza... Si tan sólo todo fuera más lento.

Algo que decir # 5

Si solamente pudiera ser capaz de simplemente ser... Todo sería más complicado, prefiero no tenerte y ya. Eso sucede cuando nos hacemos los imbéciles. La historia de mi vida.

domingo, abril 11

Insomnio, Paranoicas #1


No fue fácil, no lo fue, no fue ni sencillo, ni extremadamente feliz. Simplemente sucedió, cómo cuando la gente decide morirse, sucede y ya, lo decidió y ya, sin mucho drama, sin mucha trama, sucedió y ya. Uno hace las cosas y listo... Hay quienes prefieren pensar, no soy de los que piensa demasiado, tampoco soy de los que se arrepiente, tampoco soy de los que se justifican, pero no viviré dándome golpes de pecho, los golpes a los que les gusta golpearse, por mi parte la prosa.

Entonces,-(porque me gustan mucho los adverbios de tiempo)-, no fui capaz de conciliar el sueño, comienzo a darme cuenta de que estar loco no necesariamente es decir locuras, no necesariamente es bueno o malo en dado caso... No pude ser capaz de soñar esa noche, ni muchas otras noches atrás, y quizás muchas otras noches adelante tampoco sea capaz. No fue fácil, pero es como cuando la gente decide amarse, sucede y ya, se besan y ya. Hay quienes prefieren pensar, no soy de los que dejan perder oportunidades porque si.

Fue allí que el sueño no se volvió pesadilla, porque no fui capaz, simplemente no lo fui... No te preocupes tú tampoco fuiste capaz. Y me desperté no una noche, varias, pero no pocas, varias, pero no demasiadas... Las suficientes, las necesarias, y las noches se hicieron para escribir... Es como cuando la gente decide irse, sucede y ya, se van y ya. Hay quienes prefieren quedarse, yo soy de los que se quedan, de los que no duermen esperando pensar durante la noche, porque de día no piensan.

Suelo despertarme antes de tiempo, tratando de encontrar algo que no sé qué es, y la noche se acaba, y las horas pasan, el sol sale, y yo sin dormir. El insomnio es bueno cuando tienes ganas de escribir.

sábado, abril 10

Son 21 primaveras, Paranoicas # 0



Todo tiene un comienzo, todo tiene una trama y un desenlace, un inicio y a veces un fin -a veces, porque generalmente no sabemos darle un final a las cosas-, y las cosas se mantienen ahí, y están ahí y se pudren ahí, no me gusta que las cosas se pudran, o le damos un final o le damos un final. Nada de esperar a que la luna llegue y se vaya, y vuelva... Nada de esperar por nada, esperar por nadie a ver por fin que hacemos con ese montón de cosas que no le damos el final adecuado, que no exterminamos de una buena vez.

Comenzó mi nuevo año, y ya han pasado 2 días, establecer prioridades es lo primero, establecer sueños, metas y muchos "must", organizar un esquema que contemple los imprevistos, y vivir sin reservas. La vida se acaba, y no estoy para procurar esperar, esperar es una de las pocas cosas que no disfruto hacer. Experiencias tras experiencias, 21 años de momentos que se han ido moldeando para formar la persona que soy, frases, miradas, palabras tras palabras, sensaciones, experimentación, un poco de aquello, de esto también, de derrotas y éxitos (más de lo primero, que de lo segundo), pero eso sí, de nada me arrepiento.

... Lo qué uno siempre se pregunta es: "Si pudiera cambiar algo de mi, ¿qué sería?...", "Si pudiera regresar el tiempo, ¿Qué arreglaría?"... Yo no cambiaría nada, no arreglaría nada... Creo que hay tener mucha valentía para aceptarse como uno es, y aceptar cuándo uno se equivoca y hace mal, no siempre se puede, no siempre se es capaz de decir "Lo hice mal" sin tener que mirar alrededor, buscando culpables sabiendo perfectamente que el único culpable es uno mismo, y por una extraña razón las cosas malas son las que quedan grabadas, he procurado cambiar eso en mi vida, no puedo vivir recordando cosas que ni al caso, no soy ese tipo de persona.

Las primaveras vienen y siguen viniendo, lo importante aquí es que dejen algo al irse, que los años no pasen en vano, y tan poco terminar con muchos años y pocas lecciones, con muchos años pero en soledad...

21 años en los que he procurado ser lo mejor que he podido ser, y ser mejor cada día, de eso vivo... A eso me dedico. Hay quienes tienen esa intención de cambiar el mundo, pero jamás han tenido la valentía de mirarse al espejo y de cambiarse a ellos mismos primero. He aprendido amar la trama, más que al desenlace, jamás he intentado parecer normal porque sé que fallaría en el intento, nada de máscaras que disfracen mis intenciones, pero tampoco soy un libro abierto, no tengo un grillete y aquí estaré esperando por personas dispuestas a leerme.

Sábados Como Domingos, Súperhistoria #11


Son las 3pm, y la mayoría de los fines de semana se me hacen exageradamente aburridas, es como si desde las 12pm comenzará un gran día domingo para mi, de esos en los que no hay mucho que hacer, que a veces hace calor, y estoy todo el día en pijama, de calaveras a veces, otras veces simplemente de rayas, o círculos, recuerdo que cuando estaba pequeño tenía una de aviones y otra de camiones de bomberos, son las 3:30pm de un sábado que tiene más pinta de domingo que los mismos lunes que tienen pinta de lunes, estoy viendo en la televisión, una película que termina pareciéndose mucho a mi vida, como tajadas, con queso y crema nata, tratando de engañar a mi cuerpo con un almuerzo que deja mucho que desear.

Entonces me doy cuenta que sin poder evitarlo estoy metido en una triste e inmensa casa, que cada día se hace más grande, y la gente camina por sus pasillos, entra en los cuartos, se escucha el ruido, niños llorando, a veces riendo, mucha gente, te sientes asqueado de lo injusto que estás siendo con todos... Comienzo a ver mi propio reflejo en los cuadros de la casa, y me pierdo entre tantas pinturas, e historias, esperando que suceda, cosas que no suceden, a donde se va el tiempo, o las historias que jamás conté, los pecados de la insana justicia, y la libertad de espíritus extremadamente libres.

No fue que de repente decidiera atraparte, y mantenerte aquí eternamente, esas cosas no se planean, no se deciden, simplemente ocurren, y ocurrió, entonces tú, yo, ellos, los que no conocemos comienzan a jugar también, y los fantasmas de personas que no existen habitan tú vida, escribiéndote poemas en la arena de la playa que luego el mar se llevará, y yo, sigo pensando que mis poemas dichos de boca a boca son mejores, pero claro es cuestión de perspectivas, no puedo decir que te equivocas, no puedo decir que yo tengo razón, razón que quiero tener.

Otro sábado que no se siente sábado, y el tiempo no pasa, y las tajadas no se acaban, y entonces en la película aparezco yo, representando lo que sería una versión cinematográfica de los minutos y horas de mi propia existencia. No es suficiente saber que las cosas terminan consumiéndose sobre sí mismas para saber que no eres más que una épica esfinge, entonces este domingo se acaba para dar comienzo a otro, peor.

miércoles, abril 7

El Tiempo Cuando Pienso, Súperhistoria #10


Dejar un día sin escribir no es algo que haga a propósito, hay veces que por estar pensando en elefantes rojos y azules se me olvida que debo escribir precisamente lo que pienso. A veces suelo pensar bastante, pero no necesariamente cosas muy interesantes, ¿Qué me voy a poner hoy?, ¿Debería ir a clases?, "Creo que me quedaré durmiendo", son cosas que invaden mi mente la mayoría del tiempo, hay veces que olvido dónde estoy, qué debo hacer, cómo es el nombre de la persona que tengo al frente y me está contando lo mal que le fue en el parcial de programación III (Por cierto, :) esta materia es cosa del pasado). Suelo olvidar muchas cosas por pensar en por qué uno de mis zapatos está más limpio, o por qué el profesor borra el pizarrón de cierta forma, por qué la chama de al lado me mira fijamente o por qué yo nunca he podido ser capaz de hacer eso, y entonces me doy cuenta de que soy bastante pajuo, que me hago el loco, pero a veces no me hago el loco entonces en ese momento ando en las nubes.

Mis pensamientos muchas, la mayoría, generalmente están invadidos por cosas que voy hacer a continuación, otras veces hay una persona que monopoliza lo que pienso, y pienso, y pienso... Pero no es bueno, no tanto, a veces me lo permito solo para sentirme bien, soñar es tan sencillo, pero si pienso... Ojos que no me ven, y pues sí, es sólo una persona que no me tiene en sus pensamientos, y yo soy sólo alguien más que llena su lista de amigos, "no ser suficiente" es suficiente excusa para desistir, sin embargo, no quiere decir que yo siga insistiendo, me rendí hace mucho tiempo, pero mientras tanto me permito seguir pensando, es como darle un respiro a mi cerebro cansado de tanto reírse de otras personas (no creo), no soy una joyita, eso tampoco quiere decir que justifique todo lo que he hecho, existen una toneladas de cosas de las cuales no me siento orgulloso, pero tampoco sufro por eso.

Si uno es rata o se la tira de rata, viene alguien y es rata contigo... Es como normal, uno es masoquista, y termina enamorado de la persona equivocada, cosa que es diferente a cuando te gusta alguien, uno se puede permitir que te guste mucha gente, son gustos... Pero hoy no vengo a hablar sobre eso exactamente sino de lo que pienso, y como pensar me hace olvidar lo que debo hacer, y por esa misma razón comienzan a quedar espacios, sábados vacíos, y momentos que debería llenar con las mismas cosas que pienso, pero que termino olvidando, se me va el tiempo, y los días pasan, y a veces me pregunto ¿Coño qué estoy haciendo con mi vida?, entonces me doy cuenta que la mayoría del tiempo se me va en esto, y es fácil entender que estoy perdiendo mucho tiempo pensando...

Algo que decir # 4

Lo mejor que podría esperar de ti, sería que olvides todos tus preceptos, creencias, pensamientos, sentimientos, y te dejes llevar por mis palabras... Sería bueno que esto no fuera un sueño. Y poder abrazarte fuera una realidad.

martes, abril 6

Siempre creí, Súperhistoria #9


Soy de los que jamás le tuvo miedo a la oscuridad, pero si al silencio, y por mucho tiempo creí que si cerraba los ojos en las noches, podría abrirse el piso y caería al infierno, por haber sido un niño muy bueno. Creía que el algodón venía de las nubes, que cualquier idioma que escuchaba diferente al mío era inglés, que en el 2000 los carros volarían y las casas flotarían, era ingenuo, soy ingenuo, a veces creo que el amor es una mera formalidad de los sentimientos incrustados en los seres humanos, pero si en verdad prestas atención a eso, eso no tienen sentido aunque yo quiera que lo tenga. Siempre miré al cielo en busca de extraterrestre, y pensaba que si dormía con las ventanas abiertas sería abducido una calurosa noche de octubre, creía que así como existía la bondad en mi, existía en todos.

Siempre le temí a pie grande y creía en la criptozoología, pero mi mayor miedo era perderme, fue perderme, y me perdí, y no entiendo porque razón cuando uno se pierde se aleja del sitio donde se perdió, un día ya no tuve miedo de perderme, y comencé a tenerle miedo a envejecer sin hacer nada con mi vida. Siempre creí que para ser mayor debía usar corbatas y smokings, que para tener bebés debías estar casado, por un tiempo todo fue "caca" fueron tiempos difíciles, nunca dije groserías hasta tener 17, y si acaso decía lo hacía susurrando y mirando a los lados para que nadie procurara escucharme. Creía en la religión, el muy respetado ratón Pérez, y todas las demás cosas imaginarias... De pequeño escuchaba duendes, y siempre me sentía observado por uno (será que era un duende voyerista, nunca lo sabré), creía que si ibas al doctor el podría saber lo que tu mente pensaba, y sufría porque jamás me ha parecido bonito que alguien sepa que es lo que estoy pensando. Creía que si miraba fijamente una cosa podría hacer que se moviera, creía tantas cosas que muy poco tiempo tenía para preocuparme por algo, estaba todo el día sorprendido, de tanto descubrir cosas que no sabía.

Creía que un día llegaría EQUIS persona a buscarme porque era el hijo perdido de alguien, en algún lugar remoto del mundo. Después de temer a la soledad, comenzó a gustarme, y por mucho tiempo creí que tenía algo que hacía que las personas me rechazaran, nunca creí en lo que mi profesor de deporte me dijo... Por las noches soñaba con que dentro de la tierra había un gran imán o que las rocas podrían hablarme, que los animales eran personas transformadas... No creía que las personas malas existieran. Creía que mi mamá me había buscado en un almacén de bebés, y allí me había escogido, creía que si te mantenía en mi mente por un tiempo, volverías a mi en algún momento, luego descubrí que no todo era así. Creí haberme enamorado una vez, y creí en mi propia imperfección, creí en los distintos soles que diariamente alumbraban mi día, creía en la eterna juventud, y en la eterna felicidad, creía que volar era posible si se quería de verdad, creía que si yo pensaba muy fuerte en algo alguién en algún lugar del mundo podría oirme susurrar ese algo muy cerca... Creía tantas cosas, pero la cuestión no es si alguna vez creí, la cuestión es si aún lo creo.

Algo que decir # 3

Y lo más lógico es saber que jamás nunca será, pero no entiendo de donde vienen esos celos cuando sé que existe alguien más.

Algo que decir # 2

Me gusta la forma en como pretendes que me ignoras, e intentas saber de mi.

lunes, abril 5

El Prozac que... Súperhistoria #8


El placebo de su vida, no era solamente el prozac que tomaba para su depresión, ni las tantas otras pastillas como el serotax que se tragaba para su timidez, su anormalidad, sus trastornos obsesivo-compulsivos y todas las cosas que los doctores alguna vez le diagnosticaron. El placebo de su vida era su imaginación, lo que soñaba luego de soñar. Lo que pensaba luego de pensar. No reía, no por falta de felicidad... No lo hacía, porque no sentía que debía hacerlo, reía para sí, para el prozac y el serotax que tomaba al despertar y al dormir, para las millones de cosas que despertaban junto a él, y para las tantas otras a las que aun no llegaba a ver.

Su déficit de atención no fue suficiente para no saber quién era o qué quería, lo sabía perfectamente, como sabía el color, y la forma de cada pastilla y la hora que debía tomarla y porque razón debía hacerlo... Nunca cuestiono eso, tampoco quería hacerlo, simplemente fue una acción axiomática, así es... por ende sin reproches. Su narcolepsia siempre le fue familiar, así se quería él, pues así mismo había sido siempre, ya no era el momento para cuestionar el por qué él, o por qué así.

El nunca puso fin a su vida, pues eso significaría ser cobarde, cosa que nunca fue, no él, jamás él. Todo lo contrario, supo mantenerse en el tiempo, lo supo y pudo... Sus palabras fueron más poderosas que cualquier otra cosa, y llegaron a mucha más gente de la que uno podría imaginarse, y cambiaron a muchas más personas de las que él mismo nunca imagino. Sin embargo supo guardar su euforia, sólo era un simple ser humano, con millones de problemas los cuáles el mismo grito a los mil vientos. Su prozac hizo feliz a más de uno, que noche a noche soñaban con poder verle alguna vez... Pero simplemente un día dejo de estar, y todos los que soñaban con él, lo único que pudieron hacer fue seguir soñando...

Algo que decir # 1

No siempre necesariamente necesito decir algo, por lo menos lo que hoy diré no será nada trascendental, y si lo tachamos dará igual. Por eso no constituye la continuación de una secuencia, simplemente es un paréntesis, algo que obligatoriamente no tuvo que haber pasado. Sin embargo: "Vivo imaginándome tu sonrisa, y sé que por tu mente no pasa ni mi nombre".

En todo caso debería llamarse Ironías de la vida #1.

sábado, abril 3

None, Súperhistoria #7


No siempre creyó que la mejor forma de escapar era corriendo necesariamente, había veces que pensaba que escapar era simplemente dejar de estar, cosa que nunca logró, siempre estuvo, estuvo presente intrínsecamente en cada momento, instante... No dijo mucho, tampoco fuera que obligatoriamente sus palabras fueran importante, la importancia tampoco llegó. Días con noches, noches y noches, y días también, de leer, leerTE y leerME, esperando por ser leido.

Cosas que nunca dijo, pero que supo leer del lugar adecuado, cada cierto tiempo. En habitaciones acolchadas el tiempo se fue volando, mientras continuaba leyendo, lo que su mente siempre quiso leer, mientras de pintura verde se teñían las blancas paredes que a veces desaparecían y daban pasó a lo que su imaginación fuera capaz de crear, habitaciones blancas.

La felicidad no fue efímera, más para otros fue inentendible, sonreír para sí eso solía hacer, cuando la luz se colaba por una pequeña ventana en lo más alto de la pared este... Había días que desde el suelo miraba al techo, y con eso era suficiente, la vida era suficiente, el tiempo fue suficiente, no existió forma de que algo no fuera suficiente... Entonces la ausencia, el desenlace final, lo que tenía que pasar, y la habitación blanca quedo vacía, y más nunca se tiño de verde...

viernes, abril 2

Lo Inesperado, y amor Súperhistoria #6


El amor está en el ambiente, pero con la suerte que me caracteriza, no quiero comenzar hablar sobre mis desaventuras amorosas... Me gusta pensar que fueron cosas del destino, y a lo mejor hasta se me muere la mosca, y soy tan despegado, seco, poco afectivo, y me cuesta demostrar lo que siento, o quizás y es todo lo contrario, y soy el ser más idiota del mundo que termina dando todo, sin recibir nada, pero aquí "Lo más importante, no es lo que esa persona puede hacer por ti, sino lo que tú puedas hacer por esa persona", "Lo más importante no es lo que sienta por ti, sino lo que tú sientas por ella".

El tiempo no necesariamente es nuestro aliado, dure mucho tiempo sin usar reloj, por pensar que el tiempo no me regía, "Soy libre, no necesito horarios", siempre terminaba llegando tarde a todos lados, el tiempo se volvió algo así como un papá coño 'e madre, de esos que no guardan secretos, y te echan la paja de frente, "verga con papás así :/". En realidad la cosa de hoy era principalmente lo inesperado, el tiempo trae cosas inesperadas, y cierras los ojos, abres los ojos, aparecen y desaparecen cosas, inesperadamente te enamoras a primera vista, y de un día para otro dejas de sentir amor, un día estamos, al otro no sabemos, mientras el sol cada mañana sale por detrás de una montaña, y a nadie eso parece impresionarle, que hay estrellas, lunas, y planetas, que vivimos en universo infinito e incalculable y eso parece ser algo cotidiano...

Yo no puedo dejar de impresionarme, creo que en eso se me va la vida, vivo impresionado con todo, y es que escucho hablar y a veces leo también sobre algo que dicen, y ese algo... es algo así: "La perfección no existe y es aburrida"... PERO, no marico, no puede ser... Todo es tan perfecto, tan exacto, tan increíblemente increíble, que YO no puedo creer que la perfección no exista, y que de paso sea aburrida, aburridos los ojos que dejaron de impresionarse, la gente ve un eclipse y no se impresiona, como si eso fuera algo de todos los días. Los corazones no laten porque si, ¿No te impresiona eso?.

Porque un día ves a una chama, y hacen conexión inesperadamente y se enamoran... Impresionante la cosa, las mariposas en el estomago, las manos sudorosas y frías, las piernas tiemblan a veces, y si no sabes controlar los nervios se te quiebra la voz, y sin embargo no nos impresionamos, que el cuerpo sea capaz de saber quién coño es la persona que te mueve el piso, la persona que te da nota, ¡Qué mierda!, la persona que quieres desesperadamente... Y aun así tengamos las santas pelotas de no impresionarnos, por lo inesperado de la vida y bueno por ser hoy el amor.

pd: Impresiónate loco.

jueves, abril 1

Mala Idea, Súperhistoria #5


Las malas ideas abundan, recuerdo de niño cuando mi mamá constantemente me decía: "Coño es que no inventas nada bueno", ahí mi consciencia automáticamente decía: "Viste, TE LO DIJE, era una mala idea"... En momentos como esos es cuando deseas tener un botón "Block" para bloquear esa clase de comentarios intransigentes. Son cosas que ajuro, uno de carajito tiene que hacer, porque entonces no tiene sentido la vida.

Las malas ideas no siempre son malas, como cuando te vas a la playa sin que tus padres sepan, y regresas full quemado, coño... Fue una mala idea no echarte bloqueador solar, de resto todo bien, o cuando decides decirle a la persona que más te gusta, que te gusta. O cuando sin querer terminas diciéndole a la persona que amas que la amas, cuando jamás lo habías dicho. Son malas ideas pero no tampoco es que es LA GRAN MAL IDEA.

Con respecto al post de ayer, llego la respuesta, no digo que haya sido mala respuesta, lo que si digo es que soy muy inocente, pero bueno nada es perfecto. Corro contra el tiempo, tratando de que las ideas afloren antes de que sean las 12. Bueno el punto es, un día uno esta de lo más tranquilo, viviendo su vida, todo pinta genial, excepto en eso en que la mayoría nos va mal (cosa que me gusta pensar que es así), y es en conseguir alguien que te acompañe la vida, en pocas palabras tu alma gemela, bueno pero uno no le para a esas cosas, es más todo es bien excepto por algunos momentos de extrema soledad, pero de resto normal.

Luego las ex, los ex, aparecen y te dañan la existencia. Apareciste chama, como hago si me pones el mundo de cabeza, apareciste chama... Y uno ahí como el propio pendejo, entonces aparecen las malas ideas, "vamos a escribirle a ver qué pasa", "una salida con ella no hace daño", "primero fue sábado que domingo, así que...", "voy a verla que malo puede pasar"... A veces las malas ideas son buenas, otras veces no tanto. En mi caso verte hoy fue una mala idea. Pero te vi, y cada día estoy más seguro de lo equivocado que estaba de ti. Pero quería verte igual...